En el agua no hay barreras

El Club de Natación Adaptada Murcia lucha contra viento y marea para seguir a flote

Las barreras sociales con las que crecen de las personas con diversidad no son más grandes que su afán de superación, y eso es algo que demuestran cada día los integrantes del Club de Natación Adaptada Murcia.

Estos grupos, divididos por edades y por el nivel de natación, se reparten y entrenan sin descanso de lunes a sábado en las instalaciones de Inacua en Murcia. 

Las palabras de Sonia Lorca, madre y presidenta del club, bastan para comprender que los apoyos sociales brillan por su ausencia cuando se trata de aupar a personas con diversidad

. «Cuando tienes un hijo discapacitado sabes que tiene que hacer deporte. Lo apuntas a natación, pero, a la semana, el monitor te dice que no va a poder seguir, porque no se adapta al grupo». Así fue como unos padres se unieron para crear este club. 

En el  Club Natación Adaptada Murcia hay niños con: espina bífida, discapacidad intelectual, autismo, sordera. 

Hay 36 nadadores de todas las edades y de todos los puntos de la Región. A los 4 años comienzan en la escuela y a partir de ahí van compitiendo a nivel nacional. 

Más allá del  beneficio físico que la natación aporta a sus hijos, los padres destacan cómo el deporte ayuda a los niños a fomentar su capacidad de integración social, les mejora el ánimo y la autoestima, « cuando ganan una medalla, eso es un subidón para ellos», y se atreven a ir haciendo cada vez más cosas que antes no hacían. «Nosotros siempre decimos que en el agua no hay barreras. Ahí es donde ellos se sienten como uno más, y ver eso es fantástico»

  Noticia realizada por: Ana Tudela y Gabriel Zullas